–Ola de frío: cómo evitar problemas en tu aire acondicionado y la congelación de tuberías
La unidad exterior de un sistema de aire acondicionado
Un sistema de climatización está compuesto por dos unidades, una interior y otra exterior.
La unidad exterior está provista de un compresor y un intercambiador de calor. El compresor se encarga de mover todo el refrigerante contenido en el interior de las tuberías frigoríficas para trasladar la energía del interior de nuestra instalación al exterior y viceversa. Mientras que el intercambiador de calor, como su propio nombre indica, se encarga de realizar el intercambio con el aire del ambiente.
Los equipos de unidades exteriores de aire acondicionado que están directamente expuestos al clima son resistentes y capaces de soportar las variaciones climáticas como la lluvia, el viento, el granizo o la nieve. Esto se debe a que están diseñados para que las gotas de agua o la nieve no lleguen a las partes que podrían dañarse. Aunque hay que tener en cuenta que en casos de frío intenso podría llegar a congelarse.
El desescarche en la unidad exterior como solución
Sabemos que un equipo bomba de calor sufre cuando tiene que calefactar con temperaturas exteriores negativas. Si la temperatura de la calle es menor que cero, la batería de la unidad exterior tiene que estar a una temperatura inferior a 0ºC para intercambiar energía, por lo tanto es muy posible que cree hielo.
En Hitachi Cooling & Heating, damos importancia a tu confort y por este motivo, disponemos de un sistema inteligente de desescarche que tiene dos objetivos principales. El primero de ellos es eliminar la escarcha previa a la formación del hielo para minimizar los desescarches y el segundo sería maximizar los tiempos de climatización en modo calefacción.
La eliminación de la escarcha (previa a la formación de hielo), se consigue por un lado, gracias a que el intercambiador de calor de las unidades exteriores está dividido en dos, de forma que cuando retorna el refrigerante de la unidad interior aún conserva algo de temperatura con la que es posible fundir la escarcha de la parte baja del intercambiador de calor. Por otro lado, dispone de un revestimiento hidrófilo que, evita que las gotas de agua se concentren en las aletas del intercambiador de calor resbalando y cayendo a la parte baja de este donde se encuentra el refrigerante con cierta temperatura , con lo cual además se mejora la eficiencia energética del intercambiador de calor.
En lo que se refiere a maximizar los tiempos de climatización en modo calefacción, disponemos de un sofisticado software capaz de medir diferentes parámetros como son el tiempo el cual la unidad está trabajando en modo calefacción, medir la temperatura exterior y conocer en todo momento el punto de trabajo del ciclo frigorífico. Con todo ello, cuando la unidad procede a realizar un desescarche, conociendo estos datos podemos saber cuánto hielo o escarcha hay en la unidad maximizando, si es posible, el tiempo de calefacción.
Nieve acumulada en la unidad exterior
La nieve puede acumularse y congelarse entre el intercambiador de calor y la placa externa evitando un buen intercambio de aire en el mismo y reduciendo, por tanto, la eficiencia de funcionamiento.
Es importante proteger la unidad exterior de nevadas directas y por ello, se recomienda situar la unidad, como mínimo, a 5 cm del suelo e instalar una cubierta para evitar que la nieve se acumule sobre ella.
Debes tener en cuenta que, al igual que existe la posibilidad de que una unidad interior se congele, también puede hacerlo la unidad exterior de tu aire acondicionado. Este congelamiento provocará una placa de hielo en todo el intercambiado exterior, evitando un buen intercambio de aire en el mismo y por lo tanto disminuyendo el rendimiento.
Al estar esta unidad en el exterior, es mucho más difícil darse cuenta de si el aire acondicionado se está congelando.
Cuando un aire acondicionado exterior se congela, puede hacer que el dispositivo deje de enfriar, o incluso que sus componentes se averíen. El motivo de esta congelación puede deberse a diversos factores, como por ejemplo, la baja temperatura del ambiente.
Congelación en tuberías y contadores de agua
Esta baja temperatura afecta también de manera directa a otros elementos, como por ejemplo, las tuberías y los contadores.
Prevenir el congelamiento de las tuberías es esencial si no quieres que tu sistema se vea afectado por las bajas temperaturas. Por este motivo, te proporcionamos estos consejos que te ayudarán a impedir que el hielo se apodere de las tuberías:
- Evita que el agua esté estancada.
- Deja circular el calor en los muebles por donde pasen las tuberías.
- Cierra las llaves de paso y vacía las tuberías.
- Aísla las tuberías.
- Mantén la calefacción por la noche.
- Utiliza un secador u otra fuente de calor.
También te recomendamos abrir algún grifo con un pequeño hilo de agua durante la noche si hay previsión de temperaturas muy bajas. Y si no vas a estar en casa, cierra la llave de paso y vacía la instalación para que no se congele.
Hay que prestar especial atención a los contadores, que son elementos que también pueden verse fácilmente afectados por las bajas temperaturas:
Primeramente, debes proteger con material aislante los contadores de agua, grifos o tuberías más expuestas para evitar su congelamiento.
Por otro lado, tendrás que aislar el contador y los tramos de tubería descubiertos con fibra de vidrio o lana de roca u otros aislantes como papel de periódico, coquillas de espuma o poliestireno expandido.
Los técnicos aconsejan proteger el contador de las heladas a través de medidas sencillas, como, por ejemplo, poner en el cajetín un poco de corcho-pan por delante y por detrás. También está la opción de meter en una bolsa de basura papel burbuja o papel de periódico, para que no se moje, incluso se puede cubrir con ropa vieja. Utilizando estas medidas, puede llegar a soportar los 11 o 12 grados bajo cero.
Por otro lado, cubrir las tuberías que rodean el contador con espuma de poliuretano, poliestireno expandido u otro material aislante ayudará a prevenir y evitar posibles problemas.
Si vas a estar fuera de casa durante un período largo de tiempo y, por tanto, el agua de la instalación interior no va a correr, te recomendamos que cierres la llave de entrada de agua y vacíes la instalación interior: así se evitan roturas por congelación. Si se produce una congelación en el contador y la vivienda queda sin suministro de agua, no debes forzar la llave de paso.
Ahora que convivimos con temperaturas muy bajas, son muchos los factores que debemos tener en cuenta. El riesgo por la aparición del hielo es más alto que nunca, y para evitar la congelación, debemos tener preparadas las unidades de aire acondicionado exteriores, las tuberías y los contadores, entre otros. De esta manera conseguiremos que sus sistemas no se vean afectados y que rindan de manera óptima.
Si alguno de estos elementos se viera alterado, recuerda seguir los consejos y las recomendaciones y nunca forzar los mecanismos.
by Hitachi Cooling & Heating
